Nos quejamos del terrible estrés diario y corremos a todas partes. Pero no hay que correr, hay que planificar. Si te ves corriendo es que tienes que planificar más. Terminarás tus gestiones en la mitad del tiempo (o menos) si planificas más. Y dejarás de agobiarte. Planificando ves que puedes conseguir tus sueños en menos tiempo y eso entusiasma.
La clave de la eficacia no es correr más sino planificar. Cuando planificas encuentras atajos y descubres maneras de completar varios proyectos al mismo tiempo. Planificar ahorra días y meses porque tus movimientos planificados cubren varias gestiones al mismo tiempo.
Por ejemplo: Completar la tarea de convencer a alguien de algo. Planifícalo y verás que puedes:
- Convencer a esa persona.
- Al mismo tiempo entrenar tus dotes de persuasión.
- Al mismo tiempo ver en qué más cosas podéis colaborar. ¿Un socio de futuro?
- Al mismo tiempo que te diriges a él aprovechas para pasar por X sitios y reanimar otras gestiones que si no se dormirán. Dejarás unos documentos en su sitio y aprovecharás para comentar otro tema por donde pasabas.
- Pon tu mism@ lo que necesites…
Como ves esto puede refinarse muchísimo. Si planificas puedes reducir de tres a diez veces lo que tardas en terminar algo. Probado. Lo he medido. Mis planificaciones a corto plazo me ahorran tres veces el tiempo inicial y las de largo plazo hasta diez.
Así que deja de echar un pulso al tiempo y pasa más tiempo pensando.
¿Qué tal si dejas de ir corriendo a todas partes y apartas media hora diaria para pensar? En cuanto empiezas con este hábito dejas al momento de correr, de estresarte y de frustrarte. Y vendrá el entusiasmo gracias a acelerar tus objetivos.
Una idea: ¿No te merece tu alegria utilizar un tipo de transporte (ej. Bus en vez de coche) en el que no tengas que hacer nada y aproveches ese tiempo para pensar y planificar?
El respiro breve pero necesario
Tienes que hacer pausas. Desestresarse puede ser tan sencillo como hacer pequeñas pausas. Lo habrás oído mil veces, muchos slogans publicitarios se basan en las cómodas pausas. Pero no hacemos caso y creemos que trabajando sin respiro rendiremos más. Pero así rendimos menos y nos cargamos de estrés.
Haz micro pausas. Pausas de cinco minutos para respirar profundamente, levantarte de la silla y estirar las piernas un minuto. Vale andar un poco, vale un té o café, vale perder la mirada en el horizonte y vale jugar a un videojuego ¿por qué no? Se trata de tomar aire para seguir con todas tus fuerzas renovadas.
Las pausas de cinco minutos son un potente desestresante. No pierdes el tiempo, ni lo ganas. El tiempo no se pierde ni se gana, el tiempo es útil o inutil. Descansar cinco minutos regenera tu subconsciente, ordenas ideas porque dejas trabajar al subconsciente sin enviarle información nueva. Entonces vuelves a retomar lo que hacías y tienes la mente clara. De repente aparece esa idea que se resistía gracias a tus cinco minutos de pausa. Y vuelve la motivación.
Algo que a veces olvidas: ensalzar tus fortalezas
Es bueno admitir debilidades, ser honesto contigo es la mejor política porque reconociendo tus debilidades sabes dónde mejorar. Pero lo contrario también funciona.
Ser honesto también es admitir fortalezas, que las tienes!. Reconocer tus puntos fuertes sirve para tener entusiasmo y levantarte todos los días de un salto. Saber que vales y haces algo importante es un aliciente enorme para seguir. Más entusiasmo.
La mayoría se tortura demasiado con sus debilidades. En vez de verlas como oportunidades de mejora, su humildad excesiva les hunde. Pero también hay que concentrarse en las fortalezas porque son las que corrigen las debilidades. Si tu fortaleza es la perseverancia y tu debilidad la pérdida de concentración, ya puedes solucionar esa última debilidad. A partir de ahora dirás: “Soy bueno perseverando y cuando vea que mi mente se escape diré: “Vuelvo a ello, vuelvo a ello y vuelvo a ello“. Y corregirás tu punto débil gracias a reconocer tus fortalezas.
Puedes tener las mejores ideas del mundo, los mejores contactos y tener talento, pero necesitas ensalzar tus fortalezas para entusiasmarte y seguir. No las escondas. Aunque sea para ti. Ser consciente de tus fortalezas eliminará tus puntos débiles. ¿Para qué la modestia de ver sólo debilidades?
No la escondas más y cultiva tu auto-liderazgo. Una habilidad reconocida potenciará las demás.
Desde hace miles de años la mayoría cae en la trampa de absorberse en su trabajo y en los problemas que no disfrutan de la vida. Se empeñan en que su día a día es muy complicado y que no tienen tiempo de planificar su futuro. Se escudan en la falta de tiempo y cometen el error mortal de no dedicar parte de su tiempo a pensar y otra parte a disfrutar. Sólo piensan en el dinero, en lugar de en cómo mejorar su vida de raíz. “No tengo tiempo para eso” dicen, como si su vida fuera la única difícil.
Nunca caigas en ese error.
Por eso te daré 4 claves para que seas tú que lo gestiones y seas feliz. Rápidamente. Un déficit en cualquiera de ellas frenará tus avances y abrirá la puerta al estrés y las frustraciones.
Sigue estas cinco claves (no es difícil) notarás que tu vida cambia por momentos.
1 . Salud y energía
Necesitas energía para pensar y vivir bien. Es lo primero para una buena vida. Algunos abusan de todo tipo de venenos en forma de drogas y pastillas para sentirse bien. Pero sólo disfrutarás de buena energía si es natural. Es la paz mental tras el deporte o la claridad tras una buena noche de sueño. Sólo entonces llega la verdadera vitalidad.
La mayoría no piensa en su salud hasta que enferma. No piensa en sus dientes hasta que llega el dolor de muelas, no piensa en hacer ejercicio hasta que no puede subir las escaleras y no piensa en su dieta hasta que se asusta con un infarto. Recientemente un amigo mío no pensó en dejar de fumar hasta que pasó tres días en el hospital a punto de morir. Así que vigila tu salud antes de que sea tarde. Es la base de todo.
Necesitas energía. Y la solución no es revolucionaria: haz deporte y come sano. Aunque hoy “no lo necesites”. Porque sí lo necesitas.
2 . Relaciones
Puedes llegar lejos esforzándote. Pero llegarás mucho más lejos si aumentas tus relaciones. Aristóteles dijo que somos animales sociales. Por eso tu capacidad de esfuerzo por mantener relaciones de calidad con tu pareja, hijos, amigos y compañeros de trabajo mejorarán tu salud mental. Las personas con altos niveles de autoestima son los que se llevan bien con los demás, se gustan a sí mismos y gustan más a los demás. Lo uno refuerza a lo otro.
Nunca des tus relaciones por sentado. Damos erróneamente por hecho que todo tiene que ir bien sin poner de nuestra parte, sobre todo con la gente importante de nuestra vida. Pero hay que actuar para que la chispa no se apague. Es fácil olvidarlo hasta que surge un problema y es demasiado tarde para recibir apoyo.
Así que aumenta tus relaciones y cuídalas. Así ellas te cuidarán a ti. Presentarte a un desconocido o una llamada a tiempo para felicitar el cumpleaños nunca estarán de más.
3 . Trabajo significativo
Nunca me cansaré de repetirlo: tiene que gustarte lo que haces. Haz un pacto con tu trabajo: tú das tu mejor versión y él te proporciona satisfacción.
Busca un trabajo que:
- te guste
- seas bueno en ello (fácil si te gusta)
- y que esté bien pagado (también fácil si te gusta).
Cuando te gusta lo que haces sientes que creces y que influyes en el bienestar de los demás. Que eres realmente feliz cuando estás contribuyendo.
Busca el empleo o negocio que coincida con tus talentos. Cultivar fresas, dar clases, asesorar, escribir, actuar o inventar, lo importante es que te guste. Entonces serás bueno y podrás ganar mucho dinero. No siempre trabajarás el 100% del tiempo en lo que te guste, siempre habrá partes administrativas que no sean lo tuyo, quizás disfrutes más del marketing que de la producción, o viceversa, pero si disfrutas la mitad del tiempo vas bien.
Es curioso que los que ofrecen empleo creen que motivarán a los empleados sólo con el dinero.
Pero sale más barato que todo eso. Las personas queremos
A) que el trabajo signifique algo en los demás, que en cierto modo “les admiren”
B) que el trabajo nos guste
C) que esté bien remunerado (pero esto va después que el A y el B).
El dinero será bienvenido, pero rendirás más (ya a largo plazo ganarás más dinero) si das significado a lo que haces.
Y lo mismo si quieres retener a los mejores. Si quieres un equipo con superrendimiento dales una misión, hazles sentir importantes. Así lograrás productividad y un ambiente de uno para todos y todos para uno.
4 . Independencia financiera
No olvides que el mayor miedo es a la pobreza. Tenemos un miedo atroz a ser despedidos y quedarnos sin dinero dependiendo de otros. Eso no es forma de vivir.
Por eso una de tus responsabilidades y causa de felicidad será trabajar en tu independencia financiera. No puedes vivir con miedo a un traspié laboral sobre el que no tienes ningún poder. Tienes que olvidarte del dinero para avanzar y hacer avanzar a los demás.
Por eso nunca dejes tus finanzas al azar. Necesitas autodisciplina para seguirlas, para planificar una cifra de dinero a reunirla en una fecha límite. Saber que el dinero dejará de ser una preocupación contribuirá a tu felicidad.
La zona de confort es mediocre, y la mediocridad no te permite lograr cosas extraordinarias.
Reprograma tu mente y cambia tu realidad.
Ana cuánto te leo y además leo tus piropos y todo lo que sumas a tus mails, siento que va dirigido a mí interior, todo lo que dices es un sí es lo que busco desde hace tiempo, y sigo en la misma, no avanzo conmigo y ya es hora de decir basta, que más puedo esperar, mis 65 años lo pide a gritos, vive libre, hazlo de una vez, bueno tu ya me conoces de estos vaivenes
Estimada Miriam, No hay nada más empoderante qué, cuestionarse y desaprender.
Experimentar, probar.
Para volver a aprender de cero.
Las excusas no son más que las mentiras que creaste en tu mente, para justificar tu no accionar.
La llave para forjar tu fuerza y valor personal es cumplir lo que dices que vas hacer.
Ahí crees en ti, confias en ti.
Lo único que necesitas?
Confiar en ti.
Disponerte a hacer.
Ser creativa.
Nada más ❤️🔥
Me amo,
Te amo,
Te abrazo!
P.D y si eliges buscar apoyo, cuenta conmigo, puedo acompañarte en el proceso